La Unidad de Trastornos Alimentarios del Hospital Provincial cierra sus puertas hasta finales de septiembre

  • La UTCA, que solo cuenta con dos psiquiatras y uno está de baja, tiene a más de 250 pacientes pendientes de cita.

 

Las consultas externas del programa de Trastornos de Conducta Alimentaria (TCA) de adultos ubicado en el Hospital Provincial de Nuestra Señora de Gracia, ya han cerrado sus puertas y no las abrirán hasta finales de septiembre. Así se lo hacen saber los facultativos de dicha unidad a sus pacientes. El motivo es la falta de personal, ya que solo cuentan con dos psiquiatras, de los cuales uno está de baja y el otro tiene derecho a disfrutar de las vacaciones que le corresponden, igual que le ocurre a la única psicóloga.

Mientras tanto, más de 250 pacientes pendientes de cita tendrán que seguir esperando; 157 corresponden a un psiquiatra y 106 al otro. Como ejemplo, un paciente que salió de la consulta el 12 de diciembre con la cita programada para un mes después y a fecha de hoy todavía no ha recibido la carta.

Desde la Unidad de TCA (UTCA) de dicho hospital se insta a los pacientes que se quedan sin servicio, en la época del año más inestable para los trastornos alimentarios, a que acudan a los respectivos servicios de urgencias o a las unidades de salud mental de referencia. Sin embargo, en el sector 1, al que corresponde el Hospital Royo Villanova, faltan cinco psiquiatras; en el sector 2, al que pertenece el Hospital Miguel Servet, faltan siete psiquiatras y varios psicólogos; en el sector 3, el Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa tiene la planta de psiquiatría en obras y envía a los pacientes al Hospital Militar, donde el número de camas es menor. Tampoco la UTCA de infanto-juvenil del Hospital Clínico puede derivar a la unidad de adultos a los pacientes que ya han cumplido los dieciocho años y tienen que intentar mantenerlos hasta la reapertura de dicha unidad después del verano.

Por su parte y como todos los años, el Hospital de Día de TCA de adultos también cierra en época estival. La Asociación TCA Aragón lleva años reivindicando que los tratamientos no pueden pararse durante meses y que debe aumentarse el horario para que los pacientes realicen al menos tres ingestas diarias en el centro, de 8.30 a 14.30 horas en lugar del actual de 10.00 a 14.00 horas. Además, se desconoce la fecha de reapertura del servicio.

En la Unidad de Trastornos de la Personalidad, también en el Hospital Provincial, la situación no es mejor. Actualmente la psicóloga de dicha UTP está de baja y la unidad funciona únicamente con un psiquiatra. La lista de espera, que era de un año, supera ya el año y cuatro meses.

La excusa general es que no hay profesionales. Cada año se forman una media de siete psiquiatras que realizan el MIR en Zaragoza, más los de Huesca y Teruel, pero se marchan a trabajar a Cataluña y Navarra porque allí consiguen contratos laborales mejores y más dignos. Lo mismo ocurre con los psicólogos que hacen el PIR.

La consecuencia inmediata de esta situación alarmante es que aumentan los pacientes y las listas de espera, y los casos se agravan y cronifican. ¿En qué otra enfermedad se paralizan los tratamientos durante tres meses? ¿Dónde está esa mejora en la salud mental que tanto se ha prometido en las campañas electorales?

Las cifras y el cierre demuestran que la UTP y la UTCA no se consideran servicios esenciales en Aragón, sin embargo, los TCA son el trastorno mental con mayor tasa de mortalidad, tanto por causas físicas como por suicidio. La situación era predecible y solo va a empeorar. “Por este motivo, la Asociación TCA Aragón se ve obligada a dar la voz de alarma. Esta vez, con más miedo y fuerza que nunca” afirma Consuelo Alcalá, Presidenta de TCA Aragón.

 

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